viernes, 7 de marzo de 2014

Once Upon a Time/ Érase una vez...




Supongo que muchos ya han oído hablar de esta serie e incluso puede que ya se haya convertido en una de sus favoritas si les gustan las historias fantasiosas como a mí. Aunque debo admitir que yo casi no veo televisión y mucho menos series... Para ser sincera, me aburren.
No obstante, esta me atrapó aunque no tanto desde el primer momento en que comenzaron a anunciarla. Más bien, fue por que mucha gente comenzó a hablar de ella. Okey, también no me dejo llevar muchas veces por lo que cuentan, pero se veían tan animados y la forma en como hablaban de la historia...
me cautivó.

Así que un buen día, la busqué en internet (porque en cable iban bien avanzados) y comencé a verla. Cabe decir que al principio la historia se me hacía un poco lenta, pero conforme fueron enredando los eventos y se iban descubriendo los personajes, comenzó a llamarme la atención, especialmente porque era interesante ver como se contaba la historia de todos los cuentos de hadas en nuestro mundo real.
La trama es la siguiente:
Emma Swan vive una vida solitaria en la que trabaja como cazarrecompensas en Boston. El día de su vigésimo octavo cumpleaños a Emma se le acerca un niño de 10 años que dice ser su hijo, Henry, al que había dado en adopción cuando era un bebé. Emma no quiere establecer una relación con él, aunque acepta llevarlo de vuelta a su casa en Storybrooke. Durante el camino, Henry le enseña un gran libro de cuentos de hadas, insistiendo en que todos los cuentos son reales. Al llegar a Storybrooke, Henry le cuenta que todos los habitantes son, en realidad, personajes de cuento exiliados por una maldición y sin recuerdos de sus verdaderas identidades. Esto incluye al terapeuta de Henry, el Dr. Archie Hopper, que en realidad es Pepito Grillo, y a su profesora Mary Margaret Blanchard, que en realidad es la madre de Emma, Blancanieves. Henry afirma que el tiempo está parado en Storybrooke y que la gente es incapaz de abandonar el pueblo, pero que Emma romperá la maldición ya que es la hija de Blancanieves y del Príncipe Azul. Una escéptica Emma lleva a Henry con su madre adoptiva, la alcaldesa, quien en realidad es la Reina Malvada. Cuando Henry vuelve a escaparse Emma lo encuentra y decide quedarse en Storybrooke durante una semana. Esta decisión provoca que las manecillas del reloj del ayuntamiento, antes paradas, vuelvan a moverse.

Y entonces, te das cuenta que todos las personas que viven en Storybrooke sí son personajes de cuentos, sólo que sin recuerdos. Conforme va avanzando la trama, te van contando que hacía cada quien en su respectivo cuento y cómo se cruzó con los de otros personajes.
Tal vez conforme vaya avanzando se te haga tedioso que de repente todos tengan lazos afectivos, aunque no voy a negar que eso fue lo que a mí me atrapó, pues no hay nada más interesante que descubrir amores mal pagados, magia mal usada o tratos con seres malignos que al final te pedían un precio.
Hay cuentos de todo: comienza por los clásicos de los Hermanos Grimm (Blanca Nieves, Caperucita Roja, Rumpelstiskin, Hansel y Gretel), pasando brevemente por los cuentos de Andersen y Charles Perrault... Aunque... de repente parece que juntaron todos los cuentos que nos contaba Disney, lo cierto es que le supieron dar el toque para que las historias se enlazaran unas con otras, como si fueran pequeñas matrushkas metidas en unas más grandes.

En la segunda y tercera temporada nos sacan más cuentos infantiles, de esos que nos hicieron leer cuando éramos niños y que nos cautivaron, combinando como vivirían en la vida real. Y bueno, cada sorpresa que sacan te dejan con la boca abierta... supongo que por eso se ha convertido en una serie bastante aceptada, aun con todos sus errores de producción o fallos en la historia que intentan explicar con relatos bastante extraños (que luego dejan de preocuparte).

Otra cosa que me fascinó fue cómo enlazan estos cuentos para indicar como es que vivían en el mundo de fantasías de donde vinieron (que si mal no recuerdo, se llama "El reino encantado"), además de sacarnos el por qué ciertos personajes malvados se volvieron así, como si siguieran este modelo que Rosseau una vez explicó en su Emilio: el hombre nace bueno, es la sociedad (y las circunstancias, agregaría yo) quien lo vuelve malvado. Algunos buscan la forma de redimirse, otros les surgen dudas para hacerlo y algunos otros, ni siquiera se les pasa por la cabeza. No obstante, terminas amando u odiando (o las dos cosas) a los malvados, por lo que para mí se vuelven emblemáticos (en especial La Reina Malvada y Rumpelstiskin).

Finalmente, diré que ya van por la tercera temporada y le han dado un nuevo giro: mezclaran el mundo de Oz. Aquí un avance:


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