Ahora que se están volviendo de moda las cosas que pasaron en los 90s, cada uno de los elementos que se recuerdan tanto en redes sociales como en la moda, me traen a la memoria mi infancia, con todas las caricaturas que yo veía y las modas que soñaba con seguir. Por supuesto que muchas de las cosas que surgieron en ese entonces, influenciaron mucho en mi formación tanto lectora como de escritora, aunque este último ya lo decidí hasta los 2000.
Y bueno, haciendo una recopilación, he aquí las cosas que marcaron los 90s (según yo):
1. Los juguetes como el yoyo de colores, la espiral de colores, la pistola de agua Nerf, las Cabbage Patch Kids (nunca tuve una Y_Y), y sobre todo empezaron los computarizados (aunque eran lentos, pero nos emocionaba mucho), como el tamagochi, el game boy, el Nintendo 64 o los juegos de computadora (a las que había que ponerles discos para que funcionaran y a fuerzas era estar al lado de un adulto para que él te ayudara a manejarla), los trolls (me daban miedo, así que nunca me dio por tener uno), los furbys (también me dieron miedo, sobre todo por las leyendas urbanas que circularon a su alrededor), los tazos (era divertido coleccionarlos), etc.
2. Entre las caricaturas que más recuerdo están: Jace y los guerreros rodantes, Bravestar, los Cazafantasmas, Los Tiny toons (ah, como los amaba), Fenomenoide, Los Dinoplativolos, He-Man, Los Thundercats, Los Motorratones de Marte, X- Men, Gargolas y los Animaniacs, por mencionar algunos. Además que en cable empezaron los Rugrats, Oye Arnold!, Coraje, el Perro Cobarde, Las chicas superpoderosas, Jonnhy Bravo... todas ya convertidas en clásicos.
3. Pero lo que más más creo que marca la época de los 90s, es la llegada del anime en México y poco después su auge en TV abierta. Los animes que más recuerdo son: Los gatos samurái, Mazinger Z, Almendrita, Las Aventuras de Fly, Sailor Moon, Dragon Ball, Los Caballeros del Zodiaco, BT'X, Candy Candy, Pokemon, Las Guerreras Mágicas, por mencionar algunos.
También está la música y la moda de ese entonces, aunque yo fui más popera y hasta hace unos ocho años, me di cuenta que el Power Metal comenzó a despuntar. Estaban de moda las camisas holgadas y las chamarras de cuero, junto con peinados muy nice, con toques rebeldes, así como los moños grandes (¡que han vuelto!) que en lo personal a mí me gustaban mucho. Además de los aretes hipergrandes, de muchos colores, así como la ropa muy colorida. Sí, los 90s se caracterizaron por ser muy coloridos en contraste con todo el color oscuro que traía los 80s.
No obstante, creo que también se trajo mucha moda de los 80s, pues los vampiros que empezaron a despuntar en esta década, en los 90s se hicieron más famosos, trayendo consigo la moda dark (que ahora es muy sobrevalorada y ha perdido la imagen que pretendían dar en un principio). Y ya que tocamos el tema de los vampiros, vaya, es imposible que hable de ellos y más cuando fue precisamente en mi niñez cuando empecé a amarlos, y no con la idea romanticona que nos creó Crepúsculo (ay, admito que odio esta saga, en serio), sino porque eran seres oscuros y decadentes, aunque ya con la idea de que tenían ciertos accesos humanos (aunque algo oscuros) que nos proponía Ann Rice en ese entonces. Además, se pusieron muy de moda los cazadores de estas criaturas de la noche, gracias a Buffy La cazavampiros.
También hubo muchas series interesantes, dirigidas sobre todo a adolescentes y preadolescentes de esa época que yo no disfruté mucho por ser una niña, aunque ya las que aparecieron a finales de esta década me cautivaron, en especial Sabrina, la Bruja Adolescente y El mundo secreto de Alex Mack. Esta última nunca logré ver el final.
Así es como la recuerdo yo, muy colorida...
¡Ah, y eso que estaba el mito del chupacabras! Sí, me llegó a dar miedo, después de todo, era más fácil que creyera en esas cosas que saber y entender que detrás de todo eso existía todo un show para ocultar las atrocidades que se cometían en mi país por ese entonces. Aunque no lo crean, traascendió la frontera de México y hay lugares donde todavía aseguran que sí existe.
Estos fueron los noventas, donde como ven, hay toda una inspiración impresa para mis escritos.
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